Este artículo lo escribo en honor a esos anarquistas sindicalistas anónimos que un 1 de Mayo en Chicago , del 1886, comenzaron una huelga cuyo punto álgido llego un 4 de Mayo en la Revuelta de Haymarket, por la que reclamaban una jornada laboral de 8 horas.
Gran parte de los mismos fueron ejecutados, otros encarcelados de por vida y posteriormente en 1889 y gracias a la iniciática de los Socialistas y los Laboralistas se crea la II Internacional que lucharía por conseguir lo que hasta hoy tenemos y que muchos gobiernos quieren volver a retroceder.
Este artículo vaya en agradecimiento de esos héroes anónimos por los que gracias muchos hemos vivido mucho mejor y todo ello a pesar de todo los problemas que han surgido en torno a los instituciones como los Sindicatos y similares que han defendido a los trabajadores frente a un liberalismo o neoliberalismo devorador.
Como ejemplo nada más que citar a una empresa que todos los españoles hemos nombrado millones de ocasiones, el Corte Inglés. Una empresa endeuda hasta límites que no podemos llegar a imaginar y que si por algo se ha podido destacar es por vulnerar el derecho de sus trabajadores de manera fragante y con la connivencia de los diferentes poderes en multitud de ocasiones.
No es baladí lo que este artículo dice, una empresa que desde la Inspección de Trabajo la ha acusado de “trato abusivo y autoritario” en un Centro de Tarragona a alguno de sus empleados y el Centro se negó en dar cualquier explicación.
Una empresa que premia con mobbing a trabajadores con más de 20 años de servicio. Una empresa que en el año 2009 tuvo que aceptar mediante una acuerdo de conciliación ante el Juzgado de lo Social número 20 de Madrid un acuerdo para solucionar un conflicto por no respetar sus derechos de conciliación familiar del Centro de Preciados-Callao en Madrid.
Una empresa que fue demandada por Oscar Areces Galán, hijo de su cofundador por acoso laboral y sufrir escuchas ilegales.
Una empresa que recientemente a sido condenada por el Tribunal Superior de Justicia de Galicia a pagar 30.360 euros por permitir el acoso de un Jefe a una subordinada en el Centro de Altamira, con tocamientos indebidos y otras vejaciones y después de haberlo denunciado a la Comisión Instructora para el Tratamiento de Acoso en el Corte Inglés (CITSA) sin que le prestasen la mínima atención.
Casos como estos son los que esos héroes anónimos hace más de un siglo defendieron con sus vidas y con su lucha y a los que dedicó este artículo con la máxima humildad, y animo a todos lo presentes que sigamos luchando por un mundo mejor y más honesto, en los que la mayoría puedan vivir con la dignidad que requieren los seres humanos, simplemente por ser seres humanos. POR LA LIBERTAD, POR LA FRATERNIDAD, POR LA DIGNIDAD…….